Las ondas de choque, en el contexto médico y terapéutico, se refieren a ondas de alta energía que se utilizan en diversos tratamientos para aliviar el dolor y promover la curación en diversas condiciones musculoesqueléticas. Estas ondas de choque son generadas por dispositivos especializados y se aplican directamente sobre la zona del cuerpo que requiere tratamiento.
Aquí se explican los conceptos básicos de las ondas de choque:
Generación de ondas de choque: Las ondas de choque se generan mediante un proceso llamado «electrohidráulico» o «electromagnético». En el proceso electrohidráulico, una chispa eléctrica genera una onda de choque acústica que se transmite al tejido. En el proceso electromagnético, una bobina electromagnética crea una onda de choque que se dirige hacia el área objetivo.
Usos médicos y terapéuticos:
Procedimiento: Durante una sesión de terapia de ondas de choque, el profesional de la salud o el terapeuta coloca un gel en la piel sobre la zona a tratar y luego aplica el dispositivo de ondas de choque. El dispositivo emite las ondas de choque que penetran en el tejido objetivo.
Beneficios potenciales: Los beneficios potenciales de las ondas de choque incluyen una reducción del dolor, una mejora en la función del área tratada y una aceleración en el proceso de curación. Los resultados pueden variar según la afección y la respuesta individual.
Número de sesiones: La cantidad de sesiones necesarias varía según la afección y la gravedad del problema. En algunos casos, se pueden requerir varias sesiones.
Seguridad y efectos secundarios: Las ondas de choque suelen ser seguras y tienen efectos secundarios mínimos. Algunas personas pueden experimentar molestias temporales o enrojecimiento en el área tratada, pero estos efectos suelen desaparecer rápidamente.
RESERVA AHORA
Tu tratamiento